El ?embellecer? el currÃculum daña la imagen profesional, sin embargo es una práctica común.
Por más tentador que pueda parecer, no debes caer en el error común de mentir en tu currículum. Esta falta de honestidad se ha vuelto una tendencia habitual entre los profesionistas. Mencionar algo que no se puede comprobar hace que la persona sea descartada como candidato a un trabajo y definitivamente esta falsedad acaba con la imagen del aspirante.
Quienes caen mayormente en este error son las personas entre 18 y 34 años ya que consideran el mentir como un recurso válido para acercarse a su meta de conseguir empleo.
En primer lugar datos, como los antecedentes penales, pueden ser imposibles de ocultar.
Además, es fácil detectar cuando una persona está exagerando en sus conocimientos. Los reclutadores se percatan de las mentiras laborales en el 98% de los casos. Y si no es en ese momento entonces es en los tres primeros meses en que la persona trabaja.
El mayor problema es que aún cuando una persona es contratada tarde o temprano los conocimientos que deben comprobarse generan inconvenientes al empleado.
Otros errores comunes son el exagerar el porcentaje de idioma o programas que se manejan. También está el inventar trabajos en una empresa donde no se laboró si algún familiar trabajó ahí o dar información sin pensar que los antiguos empleadores podrían ser contactados para verificación.
Estas mentiras de exagerar en el currículo pueden perjudicar en la carrera profesional puesto que estos actos se anotan en las áreas de recursos humanos de las empresas.
Es preferible admitir que no se sabe algo, pero que se desea aprender y explicar lo que se hizo en el trabajo anterior sin exagerar. Lo importante es otorgarse crédito de las capacidades que uno tiene. Esto es mucho más valorado a mentir y luego descubran que lo que dijiste es falso.
Es básico tener confianza en lo que tu CV refleja y que lo se diga sea siempre de modo honesto y ético.